(Entrevista brindada por el Dr. Diego Verrastro al diario Norte de Corrientes).
En el Congreso De La Nación ingresó un proyecto de ley para regular el consumo y comercialización de los cigarrillos electrónicos.
Los cigarrillos electrónicos son conocidos con muchos nombres y a veces resulta difícil entender lo que realmente se sabe sobre estos dispositivos. Su uso a menudo es referido como vapeo. Se trata de dispositivos accionados por una batería que calientan líquido para liberar un aerosol (vapor) que el usuario inhala. El líquido puede contener propilenglicol, nicotina, aromas y otras sustancias. Los fabricantes y defensores de los cigarrillos electrónicos sostienen que constituyen una alternativa más saludable al tabaco. Incluso, que salva vidas. Precisamente por eso bregan para que en el país se apruebe el proyecto de ley presentado en el Congreso de la Nación por la diputada correntina Estela Regidor, a través del cual se busca regular su consumo.
“La regulación del consumo y venta de los cigarrillos electrónicos es importante porque permite a los profesionales médicos incluir una herramienta más para combatir el tabaquismo. Hay una frase que es reducción del daño por tabaquismo, y todas las políticas que hubo hasta el momento de los entes que regulan el tabaco siempre fue la prevención, que está muy bien, y la prohibición del tabaquismo. Pero se olvidan de una tercera pata que sería la reducción, porque hay muchos fumadores que no pudieron o no quisieron dejar de fumar y a ellos tenemos que ofrecerles una alternativa más sana, y es allí donde interviene una alternativa que es el cigarrillo electrónico”, dijo a NORTE de Corrientes el doctor Diego Joaquín Verrastro, MN Nº 90514, asesor médico y científico de la Asociación Argentina de Vapeadores (Asovape).
“Regular esta actividad -agrega Verrastro- por separado del tabaco tiene mucha significancia porque los cigarrillos electrónicos están muy lejos del tabaco. Comparten sólo el mecanismo de incorporar nicotina pero es una mucho más limpia que la nicotina, los gases y el arsénico que se producen por la combustión del tabaco. Ya había un viejo científico, Michael Russell, que en el año 76 decía que ‘la gente fuma por la nicotina, pero se muere por el alquitrán’. Entonces poder ofrecer una alternativa más sana porque nadie dice que esto sea inocuo; no hay como el aire sano, eso hay que dejarlo en claro, esto es una herramienta para reducción del daño”, dijo Verrastro, quien comparó esta posibilidad con las muchas otras utilizadas por la medicina para evitar daños mayores en el organismo de los seres humanos.
Tanto los profesionales médicos que forman parte de Asovape como los consumidores de vapeadores sostienen, entre otras cosas, que el cigarrillo electrónico es mucho menos (llega hasta un 95%) perjudicial que el tabaco, que no existe el vapeador pasivo como sí se da con los fumadores de cigarrillos, y que la mayoría de los que utilizan este dispositivo lograron dejar de fumar. “Como herramienta de salud pública, la eficacia del vapeo está sobradamente demostrada”, explicó Verrastro.
La mayoría de los que recurren al cigarrillo electrónico para dejar de fumar emplean líquidos con nicotina. Cada usuario elige la concentración que considera adecuada, y es frecuente que la vaya reduciendo conforme pasa el tiempo y disminuye su grado de adicción. Son muchos los que acaban vapeando sin ella, lo que facilita enormemente abandonar de forma gradual no sólo el cigarrillo convencional sino también el electrónico.
En cualquier caso, gran parte del miedo que se tiene a la nicotina es infundado. “Hay mucha gente que piensa que la nicotina es un veneno supertóxico, que sólo con tocarlo te mata, y eso es absolutamente falso”, explican los especialistas.
Aunque la evidencia científica avala al vapeo como herramienta para reducir los daños por tabaquismo, sus detractores siguen siendo muchos.
Sin embargo, en 2017, el estudio más relevante al respecto, publicado por un grupo de investigadores de Grecia, Reino Unido y Francia, reveló que más de 6 millones de fumadores de la Unión Europea habían dejado de fumar y otros 9 millones habían reducido su consumo de tabaco gracias a los cigarrillos electrónicos.
El vapeo y su regulación es un tema que no fue tratado a nivel nacional, por lo que desde Asovape no sólo están atentos a lo que suceda en el Congreso y aportan todos sus conocimientos al respecto para que esta ley sea una realidad.
Los mitos y verdades:
Uno de los mitos más importantes con respecto al vapeo o la utilización de los cigarrillos electrónicos es que se trata de una puerta de entrada al tabaco cuando en realidad muy pocos reconocen que “la mayoría de los vapeadores, por no decir el porcentaje más alto de ellos, fumaba antes de empezar a vapear y a esto hay que sumarle que la mayoría son mayores de edad”, dijo el médico cirujano, asesor de Asovape, Diego Verrastro a NORTE de Corrientes.
Los motivos que aducen quienes hoy consumen este tipo de dispositivos -dijo el profesional de la salud- es para mejorar su calidad de vida y, por ende, su salud.
Es más, el mismo Verrastro dijo ser un consumidor de los cigarrillos electrónicos desde hace muchos años y que pudo dejar el tabaco gracias a ellos.
Otro de los mitos es que quienes los probaron, regresaron al tabaco. “Eso no es así -dijo-. Son muchos los fumadores que se dieron la oportunidad de utilizar el cigarrillo electrónico porque ya llevaban varios fracasos al intentar dejar el tabaco”.
Fuente: https://www.nortecorrientes.com/168463-el-vapeo-es-una-herramienta-que-permite-reducir-el-dano